ROMA, 1 Oct. (EUROPA PRESS) -
El predicador oficial del Sínodo, el sacerdote dominico Timothy Radcliffe, ha reconocido que la aprobación de las bendiciones a los homosexuales por parte del Papa provocaron "angustia e ira entre muchos obispos", a los que ha pedido que confíen en los demás durante los trabajos del Sínodo que arrancan este miércoles 2 octubre en el Vaticano para preguntarse sobre el futuro de la Iglesia.
"Fiducia Supplicans provocó angustia e ira entre muchos obispos de todo el mundo. Algunos miembros de este Sínodo se sintieron traicionados. Pero la Iglesia sólo se convertirá en una comunidad digna de confianza si asumimos el riesgo, como el Señor, de confiar los unos en los otros, aunque hayamos sido heridos", ha afirmado en la predicación durante el retiro espiritual de este martes, al que han asistido los 368 participantes.
Entre ellos, hay 53 mujeres, el 14% del total de los miembros de la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo "Por una Iglesia sinodal: comunión, participación y misión" que se realizará en el Vaticano del 2 al 27 de octubre de 2024.
El documento, publicado en diciembre tras la aprobación del Papa, encontró oposición en la mayoría de las conferencias episcopales africanas, que hicieron saber que no podrían aplicar "sin escándalo" las bendiciones a las parejas del mismo sexo. De hecho, en un comunicado publicado por el cardenal arzobispo de Kinshasa, Fridolin Ambongo, presentado previamente al Papa y al Prefecto del Dicasterio, el cardenal Víctor Manuel Fernández, los episcopados del contienen africano se negaron en bloque a aplicar estas bendiciones. El Vaticano explicó después que cada obispo sería libre de elegir cómo actuar en su propia diócesis.