MADRID 29 Ene. (EUROPA PRESS) -
Las nuevas autoridades de Siria han reiterado este martes ante el viceministro de Exteriores de Rusia, Mijaíl Bogdánov, que el restablecimiento de las relaciones entre los dos países debe pasar por "la rendición de cuentas y la justicia para las víctimas" de Bashar al Assad, huido a Moscú tras ser derrocado en diciembre de 2024, mientras las autoridades rusas tratan de preservar el control de sus bases militares en territorio sirio.
"La nueva administración también ha enfatizado que el restablecimiento de las relaciones debe abordar los errores del pasado y respetar la voluntad del pueblo sirio y servir a sus intereses", ha señalado el Mando General de Siria en un comunicado difundido en su canal de Telegram en el que ha mencionado la necesidad de que el Gobierno de Rusia adopte "medidas concretas como la indemnización, la reconstrucción y la recuperación".
El líder 'de facto' de Siria, Ahmed Husein al Shara, conocido como Abú Mohamed al Golani, ha trasladado estas peticiones a Bogdánov durante un encuentro que ambos han mantenido en la capital siria, Damasco, en la que ha sido la primera visita al país árabe de un representante de Rusia --apoyo esencial de Al Assad durante la guerra-- desde que el presidente sirio fuera evacuado a Moscú tras la ofensiva relámpago llevada a cabo por fuerzas opositoras, encabezadas por el grupo yihadista Hayat Tahrir al Sham (HTS).
"Las dos partes han entablado conversaciones sobre los mecanismos de justicia transicional destinados a garantizar la rendición de cuentas y la justicia para las víctimas de la brutal guerra del régimen de Assad", reza la nota.
Por su parte, el representante ruso ha asegurado ante la prensa que el futuro de las bases militares del país en territorio sirio "requiere negociaciones adicionales" y que "nada ha cambiado" en torno a esta cuestión. "Acordamos continuar las consultas detalladas sobre cada tema de nuestra cooperación", ha indicado en declaraciones recogidas por la agencia de noticias rusa TASS.
Asimismo, Bogdánov ha transmitido a las autoridades sirias su "gratitud por el hecho de que nuestros ciudadanos e instalaciones no resultaron dañados durante los últimos eventos". "Expresamos nuestra esperanza de que esta política continúe y que nuestros intereses en Siria no se vean afectados", ha señalado.
Las autoridades rusas han abogado por un proceso de conversaciones con Damasco para intentar preservar el control de la base aérea de Hmeimim y la base naval de Tartús, de importancia estratégica para sus intereses y hasta ahora protegidas bajo el régimen de Al Assad.