MADRID 2 Dic. (EUROPA PRESS) -
Barbados ha completado con éxito una operación de deuda por clima sin precedentes para financiar proyectos de agua y alcantarillado resilientes al cambio climático.
Con el apoyo de sus socios financieros internacionales, Barbados sustituyó deuda más costosa por una financiación más asequible, generando un ahorro fiscal de 125 millones de dólares (119 millones de euros) que destinará a mejorar la gestión de los recursos hídricos y aumentar la seguridad hídrica y alimentaria.
Con el apoyo de las garantías, Barbados se ha asegurado un préstamo a largo plazo en moneda local en condiciones favorables organizado por CIBC Caribbean, con bancos regionales que invirtieron en la transacción.
El préstamo fue respaldado por 300 millones de dólares (286 millones de euros) en garantías: 150 millones de dólares (143 millones de euros) del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y 150 millones de dólares (otros 143 millones de euros) del Banco Europeo de Inversiones (BEI), este último en el marco de la Iniciativa Global Gateway de la Unión Europea.
Esta conversión de deuda creará el espacio fiscal necesario para financiar la modernización de la planta de tratamiento de aguas residuales de la Costa Sur, que se convertirá en una moderna instalación de recuperación de agua, además de varias instalaciones asociadas. La planta, una de las primeras del Caribe, producirá agua de calidad adecuada para el riego agrícola y la recarga de acuíferos.
El espacio fiscal adicional también permite realizar inversiones para reducir las pérdidas de agua y mejorar el sistema de alcantarillado. La reducción de la contaminación marina y de las aguas subterráneas contribuirá a proteger los ecosistemas marinos y los arrecifes cercanos a la costa, la calidad de las aguas subterráneas y a salvaguardar la salud pública.
El BID y el Fondo Verde para el Clima (GCF por su sigla en inglés) aportarán un total de 110 millones de dólares (casi 105 millones de euros) de financiación inicial para el proyecto, incluyendo una subvención de 40 millones de dólares (38,16 millones de euros) del GCF.
La conversión de deuda por clima fue estructurada como un Préstamo Soberano Vinculado a la Sostenibilidad (SSLL, por sus siglas en inglés), lo que supone el primer SSLL vinculado a un proyecto soberano de seguridad del agua.
Los objetivos de sostenibilidad en los que se basa el préstamo están relacionados con el volumen y la calidad del agua regenerada aportada por la planta modernizada. Si no se alcanzan los objetivos, el Gobierno incurre en una penalización financiera, que se ingresará en un fondo fiduciario especializado en inversiones ambientales denominado Fondo de Sostenibilidad Ambiental de Barbados.
La primera ministra de Barbados, Mia Mottley, ha señalado que frente a la crisis climática, esta innovadora transacción sirve de modelo para los Estados vulnerables, aportando a Barbados rápidos beneficios de adaptación. "Con la financiación inicial de nuestros socios, estamos construyendo una instalación de vanguardia para impulsar la gestión del agua, la seguridad alimentaria y la resiliencia, mostrando cómo la innovación y la cooperación impulsan beneficios ambientales y fiscales", ha destacado.
Por su parte, el presidente del BID, Ilan Goldfajn, ha destacado qeu están "frente a un hito importante en varias dimensiones". Es la primera operación de deuda por clima centrada en la resiliencia climática, junto con una innovación financiera pionera con asociaciones sin precedentes", ha resaltado.
Finalmente, la presidenta del BEI, Nadia Calviño, se ha mostrado orgullosa de formar parte de la primera conversión de deuda por resiliencia climática, que apoyará inversiones vitales en Barbados y podría servir como crucial modelo para otras operaciones de este tipo en el futuro.